Me gana la subjetividad,
estar lúcido, callar a los lobos heridos de mi madriguera
ofrendarles las migajas del cadáver
ensanchándoles el hambre,
o dejarse llevar por ellos
aullar con ellos, perseguir a las lobas, aparearme
marcar con meados el territorio
huir de este hueco
olvidar la tersura con que nos recibió
en su desesperación el conejo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario